La biología del amor

Cuando conocemos a una persona que nos gusta, los niveles de la hormona FEA se elevan y producen un efecto similar al de las anfetaminas: aumenta nuestra energía, nuestro optimismo y la excitación

El proceso delenamoramiento es pura química. Muchas son las hormonas que entran en juego paraque una persona llegue hasta lo más profundo de nuestro corazón. La endorfina(hormona del placer), la oxitocina (nos permite llegar al orgasmo) o la dopaminacrean adicción al amor. Si a este cocktail explosivo unimos lallamada hormona FEA, somos incapaces de librarnos de las garras delligoteo.

La Hormona FEA no sellama de esta forma por ser menos agraciada que las demás, sino por tener unnombre tan raro (Fenitelanina) que se resume en estas siglas. Cuando conocemos a una persona que nos gusta, los niveles dela FEA se elevan y producen unefecto similar al de las anfetaminas: aumenta nuestra energía, optimismo oexcitación.

El flechazo

En el amor a primeravista convergen los estímulos visuales que recibimos de la otra persona, asícomo las feromonas que desprenden y de las que nos quedamos hipnotizados. Ambassustancias forman algo así como el Cupido de la biología. Cuando esto ocurre sentimos el mismo placer que al comer chocolateu oler rosas. Nuestras hormonas del enamoramiento se disparan y descubrimos queno podemos vivir sin la otra persona. Pero, ¿puede el cuerpo volverse adicto a las propias drogas que él mismo genera?

Seguro que la canciónde la colombiana Shakira 'I'm addicted to you' se ideó cuando estaba enpleno proceso de enamoramiento de Piqué. En este momentoestamos tan eufóricos que llegamos a idealizar a la otra persona y este sentimiento puede llegar a ser muy adictivo. Hay personasque sin embargo no saben estar solas y saltan de una relación a otra como`pepito grillo'. Otras simplemente se cansan cuando se acaba la pasión delprincipio.

Caducidad del enamoramiento

Estarenamorado de alguien puede ir desde los 18 meses hasta los 5 años. Despuéspasaríamos a la relación por lazos de afectividad o amor. Según un estudiorealizado a 800 personas por la Fundación Instituto Spiral de Oviedo, el8% de la población es adicta al amor, un 5% a su pareja y, por tanto, un 3 % a 'ir de flor en flor'.

Según las teorías de Stanton Peele sobre el tema,los hombres tienen más tendencia a buscar nuevas conquistas mientras lasmujeres somos más dependientes al amor con nuestras parejas. Esto explicaría el'mito' de que el hombre es infiel por naturaleza (del que no estoy muy deacuerdo), ya que es un cazador y consumidor de las personas de las que seenamora.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento