Morbo. De esta forma es cómo respondería a la pregunta anterior. No basta con ser bella, simpática, inteligente o haber triunfado en lo más alto de sus carreras. Lo que diferencia a unas mujeres de otras para ser consideradas objeto de deseo (desde un punto de vista sexual) no es ni más ni menos que el morbo. O... ¿acaso Marlene Dietrich sobresaltaba por su linda cara?

Hace tan sólo unos días la actriz italiana Monica Bellucci (no hace falta decir que ella es una sex icon en toda regla) daba un consejito en una entrevista en el Sunday Telegraph a todas las mujeres que habitan el mundo para ser tan "perfecta" como ella. Lo que decía es que se necesitaba practicar un buen sexo. Más allá de dietas estrictas o matar las horas en el gimnasio, la actriz apuesta por perder calorías sobre la cama. Claro, ella es Monica Bellucci, la diosa italiana cuyos ojos hablan por si solos... ¿Quién no se podría resistir a ella? Ella admite estar satisfecha con su imagen eso si, a pesar de muchos, dice que no volverá a realizar desnudos en sus películas... sólo hacer "cosas sexys." Films como 'Malen'a (2000) convirtieron a la actriz en todo un icono sexual, no solo por su interpretación en el papel de la mujer más deseada del pueblo de Castelcuto, sino también por realizar varias escenas en donde dejaba ver al completo un cuerpo de escándalo a sus 36 años de edad.

Para cuerpo el que lucía Pamela Anderson en Los vigilantes de la playa. Nunca antes se había visto tanta silicona por metro cuadrado, perdón, al menos en España nunca antes se había vista tanta silicona. No era normal. Hasta entonces, las mujeres que aparecían en la televisión tenían una belleza real, hasta que llegó Pamela. La primera Barbie andante de la historia. La serie, que estaba dirigida especialmente a un público adolescente, logró captar la atención también de un target más maduro. Durante toda su carrera, la actriz ha posado en numerosas ocasiones para la revista Playboy y a pesar de haber seguido probando suerte en la pequeña y la gran pantalla no la ha tenido y sus papeles se han reducido a interpretaciones secundarias en films no muy agraciados. Aún así, Pamela fue, es y será una de las mujeres que más furor han causado en el mundo de la televisión.

Su cruce de piernas en Instinto Básico impactó tanto como las últimas imágenes en las que ha aparecido semidesnuda a sus 57 años de edad y tras haber sufrido una grave enfermedad. Sharon Stone no es sólo la belleza personificada sino un ejemplo de estilo y sofisticación que dejan al descubierto que el sexo también es elegante y que un escote se puede lucir con 23 y pasando la barrera de los 50. Ser madura y seguir siendo el deseo de muchos hombres no es fácil y menos en el mundo en el que las jóvenes promesas llegan pisando fuerte. Eso sí... no contenta con su cruce de piernas decidió mostrar todos sus encantos en Instinto Básico II pero no fue algo nuevo para ella. En 1990 la actriz también posó desnuda para la revista Playboy.

Si hay un striptease que debemos de destacar en la historia del cine ese es el de Kim Basinger en Nueve semanas y media. Tal fue el impacto de esas imágenes que aún hoy en día, al escuchar ese You can live your had on de Joe Coker, seguimos visualizando a la actriz, o la sombra de la actriz, quitándose la ropa al ritmo de este tema. Con más de una treintena de películas a sus espaldas ella de las que puede presumir de que intuir es mejor que dejar ver. El morbo aumenta a medida que crece la imaginación. Kim es un ejemplo de ello, lo que no quiere decir que no haya interpretado escenas subidas de tono y con poca ropa sobre su cuerpo.

Brigitte Bardot también pertenece a esas mujeres catalogadas como iconos sexuales de la historia. Modelo, cantante, actriz y rubia.... porque si algo tienen en común muchas de estas  mujeres es su color de pelo. La francesa se convirtió en todo una estrella durante la década de los 50 y 60 pero decidió dejar los set de rodaje en el año 74 para dedicarse a la defensa de los animales. Esta femme fatale fue una de las primeras mujeres que se atrevió a posar desnuda delante de una cámara. Su peinado, su forma de vestir  una belleza demasiado moderna para la época hicieron de ella una de las mujeres más deseadas de todos los tiempos para ellos y copiadas para ellas. Grandes modelos como Claudia Schiffer han emulado su estilo con éxito pero sin embargo no han conseguido levantar en el público masculino los suspiros que levantaba la actriz francesa.

Marilyn Monroe es el icono sexual por excelencia de la historia del cine. Su ingenuidad se fundía a una picaresca que le hacían diferente al resto de mujeres de la época. En 1949 posó para la revista Playboy por tan sólo unos 50 dólares. Sería posteriormente cuando la actriz viviera su época dorada en el mundo del cine. Quizás no era la más guapa, ni la mejor actriz pero fue y será la celebrity más imitada hasta el momento. Quizás ese peso fue lo que hizo que su belleza no conociera la vejez. En su caso Marilyn siempre permanecerá joven en el ideario colectivo.

De una estrella vulnerable a otra de armas tomar. Bette Davis llamaba la atención por una personalidad arrolladora. No era bella pero su calidad como actriz la convirtieron en una mujer de armas tomar dentro y fuera de los escenarios. Está claro que ser un icono sexual depende de la personalidad de cada persona. Vulnerables, atrevidas, morbosas, fuertes. Al final, y como diría el cuento de Disney La Bella y la Bestia, la belleza está en el interior pero, ¿quién habla de guapos y feos? Aquí de los que se trata es de tener morbo...