«Me empalmo cuando veo mi coche nuevo»

La fantasía y el deseo son elementos indispensables en el sexo, pero no todo lo que se desea tiene lógica ni todas las fantasías sexuales son reales. Eso sí, cada uno es libre de enamorarse o de excitarse con lo que sea, siempre y cuando no haga daño a ningún ser vivo

PREGUNTA. ¿Puedo sentir deseo sexual por un objeto? Me empalmo cuando veo mi coche nuevo.

Se llama 'objetofilia' y se ha catalogado como una nuevaorientación sexual de personas que se enamoran de objetos o seres inanimados, por ejemplo, la Torre Eiffel o como en tu caso, tu coche. Cada uno es libre desentir deseo y enamorarse de quien quiera mientras no haga daño a los demás. Eso sí, párate a pensar un momento enlos abrazos, los besos y las relaciones sexuales placenteras que puedes tenercon una persona de carne y hueso y que un objeto, frío e inmóvil, nunca te podrállegar a dar.

PREGUNTA. Soy un chico yme excito cuando veo porno homosexual. En mi vida diaria no tengo relacionescon hombres y me considero una persona hetero, pero en ocasiones me planteo miorientación sexual cuando veo cine X de este tipo. ¿Soy gay?

La orientación sexual viaja de la mano del deseo o lafantasía. La mayoría de las mujeres, por ejemplo, se ponen a mil con el sexolésbico y no por ello son lesbianas. Hay quienes van más allá y se masturbanpensando en situaciones inverosímiles o sadomasoquistas (ser violados, ver a tupareja practicando sexo con otra persona...). Estas situaciones no pasan de lafantasía a la realidad por una simple razón: la propia persona no quiere que sufantasía se haga realidad. Otra cosa diferente es que solo seas capaz de excitarteviendo a dos hombres practicando sexo y que en la vida real una mujer no puedahacerte llegar al orgasmo. En ese caso, deberías empezar a plantearte, al menos, tubisexualidad.

PREGUNTA. Las relaciones con mi marido me dejan un vacío emocional. ¿A qué puede deberse?

Hay muchos factores que pueden afectar tu estado emocional yque provocan a la vez insatisfacción sexual. Cuando el sexo comienza a dar más quebraderos de cabeza que placer, hay quepararse y pensar qué es lo que lo produce. Estrés, ansiedad, una enfermedad o untratamiento médico que haga perder la libido pueden ser algunas de las causas. Lapareja también influye en ello. No sentirse valorado lo suficiente o unaposible infidelidad son elementos que también provocan un estado emocional bajo. Lorecomendable en estos casos es acudir a un psicólogo para poder atajar elproblema de raíz.

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